Para poder orientarte correctamente es imprescindible que tengas en cuenta varios aspectos que te ayudarán a entender mejor de qué manera afectan tus pensamientos y emociones a tu vida diaria, y cómo puedes aprender a equilibrar tu mente y tus sentidos para poder sanar las heridas y transformar una realidad que no es la adecuada en otra mucho más ajustada, no solo a tus necesidades, sino a las de la comunidad en la que vives. 

Un plano de realidad es un conjunto de circunstancias, tangibles e intangibles, que conforman un sistema de causalidades por las que se ha ido constituyendo el universo del que provenimos.

P.R.S. (Plano de realidad social)

Es el plano de realidad donde la humanidad ha ido evolucionando, dando rienda suelta a los impulsos que le han hecho ir desarrollando unas capacidades mentales y emocionales que han estado muy influenciadas por la falta de información y el hecho de que ha tenido que evolucionar sobre la marcha, bajo criterios de prueba y error con los que ha podido ir mejorando su inteligencia en detrimento de sus emociones. Este hecho es palpable en la meteórica evolución tecnológica, física y médica, y en la nula evolución para solucionar conflictos donde la inmadurez emocional ha provocado innumerables conflictos sociales, llevándonos a vivir un momento especialmente violento en gran parte del mundo en el que vivimos. 

P.R.P (Plano de realidad personal)

Este es el plano al que más atención tienes que prestar, ya que en primer lugar, está influenciado por el plano de realidad anterior, el cual, no te ha dejado desarrollar tu propia individualidad, a través de una educación que ha ido fortaleciendo creencias e ideas que te han obligado a mirar fura de tus propias necesidades mentales y emocionales, obstaculizando la relación que tienes entre tu mente y tus emociones, y que en estos instantes no están alineados. El P.R.P te va a ayudar a vivir en un presente continuo que fortalecerá aspectos tan necesarios cómo la autoestima, el amor propio, el respeto por ti mismo, etc. 

También te ayudará a identificar de qué manera has vivido sometido a unas ideas que no favorecieron tu crecimiento espiritual, ya que el P.R.S. ponía el foco en desarrollar una filosofía de vida que dejaba a un lado la importancia de ser y sentir de manera honesta, frente al excesivo interés por engrandecer aspectos que tienen más que ver con los miedos, las frustraciones y la deshumanización.

Si queremos un mundo mejor necesitamos mejorar el nuestro a través de una profunda transformación mental y emocional que nos permitirá reorientar una conciencia que está muy lejos de ser beneficiosa para conseguir un mundo más justo. 

P.Z.E